Enfrentar al terrorismo

La lucha contra el terrorismo o también llamado antiterrorismo incorpora la práctica, las tácticas militares, las técnicas y la estrategia que las fuerzas gubernamentales, militares, policiales, comerciales y de inteligencia utilizan para combatir o prevenir el terrorismo. Las estrategias de lucha contra el terrorismo incluyen intentos de contrarrestar la financiación del terrorismo.

Si el terrorismo es parte de una insurgencia más amplia, la lucha contra el terrorismo puede emplear medidas contra la insurgencia. Las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos utilizan el término defensa interna extranjera para programas que apoyan a otros países en intentos de suprimir la insurgencia, la anarquía o la subversión o para reducir las condiciones bajo las cuales pueden desarrollarse estas amenazas a la seguridad.

En respuesta a la escalada de la campaña de terror en Gran Bretaña llevada a cabo por los militantes irlandeses Fenians en la década de 1880, el Ministro del Interior, Sir William Harcourt, estableció la primera unidad de lucha contra el terrorismo de todos los tiempos. La rama irlandesa especial fue formada inicialmente como una sección del departamento de investigación criminal de la policía metropolitana de Londres en 1883, para combatir el terrorismo republicano irlandés a través de la infiltración y de la subversión.

Harcourt previó una unidad permanente dedicada a la prevención de la violencia de motivación política mediante el uso de técnicas modernas como la infiltración encubierta. Esta rama pionera fue la primera en ser entrenada en técnicas de lucha contra el terrorismo.

Su nombre fue cambiado a Subdivisión Especial, ya que su mandato se amplió gradualmente para incorporar un papel general en el contraterrorismo, combatiendo la subversión extranjera e infiltrando el crimen organizado. Las agencias de aplicación de la ley, en Gran Bretaña y en otros lugares, establecieron unidades similares.

Las fuerzas de contraterrorismo se expandieron con la creciente amenaza de terrorismo a finales del siglo XX. Específicamente, después de los ataques del 11 de septiembre, los gobiernos occidentales hicieron de los esfuerzos de lucha contra el terrorismo una prioridad, incluyendo más cooperación extranjera, tácticas cambiantes que involucran equipos rojos y medidas preventivas.

Algunos países ven los ataques preventivos como una estrategia legítima. Esto incluye capturar, matar o deshabilitar sospechosos de terrorismo antes de que puedan montar un ataque. Israel, el Reino Unido, los Estados Unidos y Rusia han adoptado este enfoque, mientras que los Estados de Europa occidental en general no lo hacen.

Otro método importante de neutralización preventiva es el interrogatorio de terroristas conocidos o sospechosos para obtener información sobre parcelas específicas, blancos, la identidad de otros terroristas, independientemente de que el sujeto del interrogatorio sea culpable o no de participación terrorista. A veces se utilizan métodos más extremos para aumentar la sugestibilidad, como la privación del sueño o las drogas. Tales métodos pueden llevar a los cautivos a ofrecer información falsa en un intento de detener el tratamiento, o debido a la confusión provocada por ella. Estos métodos no son tolerados por las potencias europeas. En 1978, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos dictaminó en el caso Irlanda / Reino Unido que tales métodos equivalían a una práctica de trato inhumano y degradante y que tales prácticas violaban el Convenio Europeo de Derechos Humanos. ).